Viernes Santo
Cuando llegó la hora sexta (mediodía), hubo oscuridad sobre toda la tierra hasta la hora novena (3 p.m.). Y a la hora novena (3 p.m.) Jesús exclamó con fuerte voz: “Eloi, Eloi, ¿lema sabactani?” que traducido significa, “Dios mio, Dios mio, ¿por que Me has abandonado?”
Algunos de los que estaban allí, al oírlo, decían: “Miren, está llamando a Elías.”
Entonces uno corrió y empapó una esponja en vinagre, y poniéndola en una caña, dio a Jesús a beber, diciendo: “Dejen, veamos si Elías Lo viene a bajar.”
Pero Jesús, dando un fuerte grito, expiró.
Y el velo del templo se rasgó en dos, de arriba abajo.
Viendo el centurión que estaba frente a El, la manera en que expiró, dijo: “En verdad este hombre era Hijo de Dios.”
Esclavo: La verdad escondida sobre tu identidad en Cristo |