Confusión en Corinto
Liderazgo |
Algo extraño estaba sucediendo en Corinto. Allí había una iglesia cristiana. Y algunas personas en la iglesia – sí, en la iglesia – estaban enseñando que no había tal cosa como “resurrección”.
Así que si tu amado padre murió, ese fue el fin. Nunca volverías a verlo. Porque nadie es levantado de entre los muertos.
¿Cómo? ¿Una iglesia cristiana?
Solamente por gracia |
El Apóstol Pablo estaba molesto.
Ahora bien, si se predica que Cristo ha resucitado de entre los muertos, ¿cómo dicen algunos entre ustedes que no hay resurrección de muertos?
Y si no hay resurrección de muertos, entonces ni siquiera Cristo ha resucitado; y si Cristo no ha resucitado, vana es entonces nuestra predicación, y vana también la fe de ustedes.
Aún más, somos hallados testigos falsos de Dios, porque hemos testificado contra Dios que El resucitó a Cristo, a quien no resucitó, si en verdad los muertos no resucitan.
Porque si los muertos no resucitan, entonces ni siquiera Cristo ha resucitado; y si Cristo no ha resucitado, la fe de ustedes es falsa; todavía están en sus pecados. Entonces también los que han dormido en Cristo están perdidos. Si hemos esperado en Cristo para esta vida solamente, somos, de todos los hombres, los más dignos de lástima.
¡Ridículo! ¡No te llames “cristiano” y luego dime que Dios no puede resucitar a los muertos! Si ese es el caso, somos grandes feos mentirosos, todos moriremos en nuestros pecados, y ese es el final. Buena religión que tienes ahí.
Pero Pablo aprovecha la oportunidad para decirnos la verdad – la gloriosa e increíble verdad que cambia todo.
Sí, Dios puede resucitar a los muertos (por supuesto Él puede – Él es DIOS), Jesús realmente volvió a la vida.
Pero ahora Cristo ha resucitado de entre los muertos, primicias de los que durmieron.
Porque ya que la muerte entró por un hombre, también por un hombre vino la resurrección de los muertos. Porque así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos serán vivificados.
Pero cada uno en su debido orden: Cristo, las primicias; luego los que son de Cristo en Su venida. Entonces vendrá el fin, cuando El entregue el reino al Dios y Padre, después que haya terminado con todo dominio y toda autoridad y poder.
Pues Cristo debe reinar hasta que haya puesto a todos Sus enemigos debajo de Sus pies. Y el último enemigo que será eliminado es la muerte.
Pero hay algo más aquí que es bastante increíble. Aquí vemos, todo el mundo “en Adán” – es decir, sus descendientes, los seres humanos – todos morimos. Pero todos “en Cristo” – los creyentes – el pueblo de Cristo – ¡todos “serán vivificados”!
¿Estás “en Cristo”? Si estás en Él, cuando se le da toda la gloria y el poder, estará a su lado. Tendrás vida con Él. Vida real, física. Para siempre.
La resurrección no es sólo otro milagro en la Biblia. Hace toda la diferencia en la vida de cada creyente. Pero ahora Cristo ha resucitado de entre los muertos, primicias de los que durmieron (murieron). Él fue el primero – somos los siguientes. Cada creyente. ¡Qué maravillosa verdad!