Manasés (hijo de Ezequías) (Personas en la Biblia)

Manasés era el hijo del rey Ezequías y Hepsiba. Él era un rey de Judá, seguido de su hijo Amón (2Reyes 20:21-21:1; 2Reyes 21:18).

Manasés era un rey malvado, involucrado en adoración de ídolos y prácticas ocultistas. Incluso quemó a uno de sus hijos como sacrificio. Su malvado reinado es una de las principales razones por las que Dios finalmente juzgó a Judá (Jeremías 15:3-4).

Dios trajo la condena a Manasés permitiéndole ser capturado y deportado a Babilonia. Allí, Manasés se arrepintió y finalmente regresó a Israel para adorar al verdadero Dios.

El SEÑOR habló a Manasés y a su pueblo, pero ellos no hicieron caso. Por eso el SEÑOR hizo venir contra ellos a los capitanes del ejército del rey de Asiria, que capturaron a Manasés con garfios, lo ataron con cadenas de bronce y lo llevaron a Babilonia. Cuando estaba en angustia, Manasés imploró al SEÑOR su Dios, y se humilló grandemente delante del Dios de sus padres. Y cuando oró a El, Dios se conmovió por su ruego, oyó su súplica y lo trajo de nuevo a Jerusalén, a su reino. Entonces Manasés reconoció que el SEÑOR era Dios.
2Crónicas 33:10-13

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