La Obra del Espíritu Santo
La Santidad de Dios |
Empezamos con las palabras de Jesús:
Pero Yo les digo la verdad: les conviene que Yo me vaya; porque si no me voy, el Consolador no vendrá a ustedes; pero si me voy, se Lo enviaré. Y cuando El venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio; de pecado, porque no creen en Mí; de justicia, porque Yo voy al Padre y ustedes no Me verán más; y de juicio, porque el príncipe de este mundo ha sido juzgado.
Juan 16:7-11
Qué interesante que el Espíritu Santo viniera a los discípulos (como lo hizo en Hechos 2:1-4), y sin embargo, iba a tener un ministerio para el mundo. “Convencerá al mundo de pecado, de justicia, y de juicio.”El Espíritu en nosotros está obrando a través de nosotros para enseñar al mundo.
Pues por un mismo Espíritu todos fuimos bautizados en un solo cuerpo, ya Judíos o Griegos, ya esclavos o libres. A todos se nos dio a beber del mismo Espíritu.
1Corintios 12:13
En este versículo, el “cuerpo” se refiere al cuerpo de Cristo – la Iglesia. El bautismo del Espíritu no es el bautismo en agua. Es el milagro que nos pasa cuando el Señor nos salve – o hemos “nacido de nuevo” (1Pedro 1:23).
En [Cristo] también ustedes, después de escuchar el mensaje de la verdad, el evangelio de su salvación, y habiendo creído, fueron sellados en El con el Espíritu Santo de la promesa, que nos es dado como garantía de nuestra herencia, con miras a la redención de la posesión adquirida de Dios, para alabanza de Su gloria.
Efesios 1:13-14
De acuerdo con estas Escrituras, cada cristiano es sellado y bautizado por el Espíritu cuando creen. De hecho, la presencia del Espíritu Santo es la garantía de Dios de que nos ha dado vida eterna.
¿O no saben que su cuerpo es templo del Espíritu Santo que está en ustedes, el cual tienen de Dios, y que ustedes no se pertenecen a sí mismos? Porque han sido comprados por un precio. Por tanto, glorifiquen a Dios en su cuerpo y en su espíritu, los cuales son de Dios.
1Corintios 6:19-20
Nuestros cuerpos son el templo, o lugar de residencia, del Espíritu. Eso significa que le pertenecemos a Él – nuestros cuerpos y espíritus. ¿Cómo podría ese conocimiento cambiar la forma en que vives?
La Biblia enseña que todo creyente verdadero ha sido bautizado por el Espíritu y que el Espíritu ha hecho su hogar permanente en nosotros. Pero ¿qué hay de ser “llenos del Espíritu”? ¿Cómo se relaciona eso con todo esto? Hablaremos de eso la próxima vez.
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