Una Historia de Navidad: El Rey de Justicia (parte 6)
No, Acaz. Siria e Israel no conquistarán a Judá. Dios lo ha dicho. ¿Quieres una señal de Dios para mostrarte que Él es fiel?
Acaz había respondido con falsa humildad. “No pediré, ni tentaré a Yahvé.”
Pero Dios dará una señal a la familia del rey David. Sí, Acaz es un rey malvado, pero Dios todavía va a cumplir sus promesas a su familia – a la Casa de David.
Después del juicio, habrá salvación. Emmanuel – Dios con nosotros. La salvación es de Yahvé – Jehová – Dios con nosotros.
Isaías podía ver más allá de los tiempos del juicio hasta el tiempo de la salvación. Cuando miró hacia el norte a Israel, ya no vio a una nación que venga a atacar a Judá. El norte de Israel – la tierra de Galilea –
El pueblo que andaba en tinieblas
Ha visto gran luz;
A los que habitaban en tierra de sombra de muerte,
La luz ha resplandecido sobre ellos.
Ya sabemos de Maher Shalal Hash Baz – el hijo de Isaías y su esposa. Pero otro bebé iba a nacer. Emmanuel…
Porque un Niño nos ha nacido, un Hijo nos ha sido dado,
Y la soberanía reposará sobre Sus hombros.
Y se llamará Su nombre Admirable Consejero, Dios Poderoso,
Padre Eterno, Príncipe de Paz.
El aumento de Su soberanía y de la paz no tendrán fin
Sobre el trono de David y sobre su reino,
Para afianzarlo y sostenerlo con el derecho y la justicia
Desde entonces y para siempre.
El celo del Señor de los ejércitos hará esto.
Eso no es el hijo de Isaías, pero – un Niño del futuro.
Este Bebé es Dios mismo. Dios en la carne. Dios todopoderoso.
Y este Niño gobernaría para siempre sobre el trono de su padre David. Este Niño nació para hacer todo lo que Acaz no estaba haciendo – Él traería paz y justicia – para siempre.
¡Ay de los que decretan estatutos inicuos,
Y de los que constantemente escriben decisiones injustas,
Para privar de justicia a los necesitados,
Para robar de sus derechos a los pobres de Mi pueblo,
Para hacer de las viudas su botín,
Y despojar a los huérfanos!
La idolatría, la injusticia. Acaz – ¿cambiarás tu camino? En lugar de buscar espíritus y pedir ayuda de los muertos y servir a ídolos, ¿temerán al Dios viviente?
La destrucción se retrasará – la alianza a punto de atacar a Judá caerá. Había tiempo de arrepentirse.
Es hora de decidir. Acaz, ¿qué vas a hacer?