¡Ya hemos estudiado 50 preguntas! Si estás memorizando las preguntas, ya has aprendido mucho acerca de Dios y de la humanidad y la salvación. ¡Y ahora estamos aprendiendo los Diez Mandamientos! Bien hecho. 😉
Y hoy, las preguntas 41 a 50. Haz clic en la cita de un versículo para ver la respuesta y la entrada con ese versículo. Estamos ahora más de la mitad de camino a través del año…
Ustedes, pues, oren de esta manera: ‘Padre nuestro que estás en los cielos, Santificado sea Tu nombre.’ Mateo 6:9
P.¿Cuál es el tercer mandamiento? R.El tercer mandamiento requiere el uso santo y reverente de los nombres de Dios, sus títulos, atributos, ordenanzas, palabra y obras.
Recuerda que debes ensalzar Su obra, La cual han cantado los hombres. Job 36:24
P.¿Cuál es el tercer mandamiento? R.El tercer mandamiento requiere el uso santo y reverente de los nombres de Dios, sus títulos, atributos, ordenanzas, palabra y obras.
Me postraré hacia Tu santo templo, Y daré gracias a Tu nombre por Tu misericordia y Tu fidelidad; Porque has engrandecido Tu palabra conforme a todo Tu nombre. Salmo 138:2
P.¿Cuál es el tercer mandamiento? R.El tercer mandamiento requiere el uso santo y reverente de los nombres de Dios, sus títulos, atributos, ordenanzas, palabra y obras.
Guarda tus pasos cuando vas a la casa de Dios, y acércate a escuchar en vez de ofrecer el sacrificio de los necios, porque éstos no saben que hacen el mal. Eclesiastés 5:1
P.¿Cuál es el tercer mandamiento? R.El tercer mandamiento requiere el uso santo y reverente de los nombres de Dios, sus títulos, atributos, ordenanzas, palabra y obras.
P.¿Cuál es el tercer mandamiento? R.El tercer mandamiento requiere el uso santo y reverente de los nombres de Dios, sus títulos, atributos, ordenanzas, palabra y obras.
Y cantaban el cántico de Moisés, siervo de Dios, y el cántico del Cordero, diciendo: “¡Grandes y maravillosas son Tus obras, oh Señor Dios, Todopoderoso! ¡Justos y verdaderos son Tus caminos, oh Rey de las naciones! ¡Oh Señor! ¿Quién no temerá y glorificará Tu nombre? Pues sólo Tú eres santo; Porque todas las naciones vendrán y adorarán en Tu presencia, Pues Tus justos juicios han sido revelados.”
Si tomamos este mandamiento solo como una advertencia a decir el Nombre de Dios cortésmente, estamos perdiendo el punto. En la Biblia, “Nombre” habla de mucho más que lo que llamamos a alguien. El Nombre de Dios representa todo lo que Él es. Por eso tenemos hablar – y vivir – en el respeto y honor de Dios.
P.¿Cuál es el tercer mandamiento? R.El tercer mandamiento es: No tomarás el nombre de Jehová tu Dios en vano; porque no dará por inocente Jehová al que tomare su nombre en vano. (Éxodo 20:7)
No vamos a tomar el tiempo para examinar toda la evidencia para el Antiguo Testamento. Esto es sólo una introducción a algunos de los temas te puede estudiar por tu cuenta.
Entonces, hoy vamos a los Libros de Moisés – los primeros cinco libros de la Biblia – para ver algunas pistas de la fecha de los libros y del autor.
Moisés escribió todas las palabras del Señor. Levantándose muy de mañana, edificó un altar al pie del monte, con doce columnas por las doce tribus de Israel.
Hay veces en muchos libros de la Biblia cuando tenemos un registro directo de la autoría.
Pero fue Moisés realmente calificado para escribir estos libros? ¿Tenía la educación?
Cuando la hija de Faraón bajó a bañarse al Nilo, mientras sus doncellas se paseaban por la ribera del río, vio la cestilla entre los juncos y mandó a una criada suya para que la trajera. Al abrirla, vio al niño, y oyó que el niño lloraba. Le tuvo compasión, y dijo: “Este es uno de los niños de los Hebreos.”
Entonces la hermana del niño dijo a la hija de Faraón: “¿Quiere que vaya y llame a una nodriza de las Hebreas para que críe al niño?”
“Sí, ve,” respondió la hija de Faraón. La muchacha fue y llamó a la madre del niño.
Y la hija de Faraón le dijo: “Llévate a este niño y críamelo, y yo te daré tu salario.” La mujer tomó al niño y lo crió.
Cuando el niño creció, ella lo llevó a la hija de Faraón, y vino a ser hijo suyo; y le puso por nombre Moisés, diciendo: “Pues lo he sacado de las aguas.”
Imagínete la situación en que Moisés creció. En primer lugar, él tenía acceso al pueblo de Israel. Podía oír sus historias, aprender su tradición, hablar su idioma.
En segundo lugar, fue criado en las cortes de Egipto. Podía visitar a sus bibliotecas, aprender de sus sabios, conocer gente de otras culturas.
Moisés fue excepcionalmente calificado para comunicar y dirigir.
Y alzó Lot los ojos y vio todo el valle del Jordán, el cual estaba bien regado por todas partes (esto fue antes de que el Señor destruyera a Sodoma y Gomorra) como el huerto del SEÑOR, como la tierra de Egipto rumbo a Zoar.
Piensa en este texto de Génesis 13:10. Hay algo muy interesante aquí.
Este versículo describe el valle del Jordán comparándolo con parte de Egipto. El autor, y los lectores, estaban familiarizados con Egipto – ¡tal vez más familiarizados con Egipto que con Israel!
Esto no suena como algo que fue escrito cientos de años después, en Israel. Pero suena como algo que Moisés habría escrito en el desierto.
Hay muchos ejemplos de este tipo. Pero voy a incluir uno más que es un poco interesante – Éxodo 25:5: pieles de carnero teñidas de rojo, pieles de marsopa y madera de acacia.
Este pasaje habla de los materiales que se utilizan para el Tabernáculo. Es interesante porque las acacias son muy raras en Israel, pero comunes en el desierto.
El dugongo (la foto gracias a Julien Willem)Pero hay un otra palabra difícil aquí – marsopa. En otras versiones, tejones, o delfín. La palabra en hebreo es difícil traducir, pero es posible que habla de un animal se llama el dugongo. Es como una especie de manatí. No vivía en cualquier lugar cerca de Israel, pero eran abundantes en los mares cercanos a Egipto y Arabia.
A lo largo de los libros de Moisés leemos acerca de los animales y las plantas que no son de Israel, sino de Egipto y el desierto. Muy extraño si estos libros fueron escritos en realidad mucho tiempo después de la época de Moisés, por las personas que viven en Israel.
Sí, hay mucha evidencia que tenemos los libros de Moisés. Y la próxima vez vamos a hablar acerca de cómo esos libros llegaron a nosotros.
Profesando ser sabios, se volvieron necios, y cambiaron la gloria del Dios incorruptible por una imagen en forma de hombre corruptible, de aves, de cuadrúpedos y de reptiles. Romanos 1:22-23
P.¿Qué prohíbe el segundo mandamiento? R.El segundo mandamiento prohíbe la adoración a Dios por medio de imágenes o cualquier otra forma que no decreta en su Palabra.
P.¿Qué prohíbe el segundo mandamiento? R.El segundo mandamiento prohíbe la adoración a Dios por medio de imágenes o cualquier otra forma que no decreta en su Palabra.
Así que tengan mucho cuidado, ya que no vieron ninguna figura el día en que el Señor les habló en Horeb de en medio del fuego; no sea que se corrompan y hagan para ustedes una imagen tallada semejante a cualquier figura: semejanza de varón o de hembra, semejanza de cualquier animal que está en la tierra, semejanza de cualquier ave que vuela en el cielo, semejanza de cualquier animal que se arrastra sobre la tierra, semejanza de cualquier pez que hay en las aguas debajo de la tierra. Deuteronomio 4:15-18